Como cada cinco años, la sociedad hondureña se encuentra en este momento inmersa en el proceso de selección de las y los magistrados que integrarán la Corte Suprema de Justicia 2016-2020. Sin embargo, una vez más, también está de cara a un proceso altamente cuestionado, que desdibuja el ideal de constituir un Poder Judicial independiente y ajeno a la injerencia de la política partidaria.
La selección de las y los magistrados comenzó a mediados del año 2015, no obstante, los cuestionamientos surgen con el nombramiento de la propia Junta Nominadora –JN-, cuya función es la de escoger los 45 precandidatos/as que se enviarán al Congreso Nacional, para la selección de los 15 magistrados y magistradas que integrarán la nueva Corte Suprema.
