El Centro de Estudios para la Democracia (CESPAD) presenta ante la sociedad hondureña los hallazgos de la segunda encuesta de opinión ciudadana levantada entre el 1 y el 15 de agosto del 2011. El objetivo se ha centrado en indagar la evolución de las percepciones ciudadanas acerca de temas como la satisfacción con la democracia, valoración de la gestión gubernamental de Porfirio Lobo Sosa, la confianza en las instituciones, el espectro político-ideológico de los ciudadanos y ciudadanas, la intencionalidad del voto hacia los partidos, y la aceptación y simpatías de las personalidades sociales y los candidatos políticos potenciales.
En general, de acuerdo a la opinión de la ciudadanía vivimos una prolongación de la crisis del bipartidismo político tradicional, continúa la insatisfacción con la democracia, la desconfianza hacia las instituciones se ha profundizado y los hogares no tienen expectativas de mejorar su economía familiar.
La percepción de las hondureñas y los hondureños es que estamos ante un gobierno poco eficaz en la solución de los problemas fundamentales del país, que la conflictividad social seguirá igual o aumentará y que se mantienen o han aumentado las violaciones a los Derechos Humanos.
La ciudadanía hondureña no se muestra proclive a tener una adscripción ideológica precisa, y por lo tanto, no resulta extraño la falta de definición respecto a los referentes de derecha o izquierda. Sin embargo, la población hondureña expresa su voluntad a modificar sus patrones políticos tradicionales en la arena electoral. Un 66% de la población encuestada estaría dispuesta a cambiar su forma tradicional de votar, dependiendo del candidato y propuesta de cambio.